jueves, 15 de julio de 2010

MOBBING..

Hoy amanezco rodeado de soledad, un silencio voraz resuena en mis oídos y en mi cama solo caben ilusiones, sueños, deseos, muchos recuerdo y algún que otro miedo, el cual le pego la patada tal como abro las cortinas de mi cuarto y me asomo a la terraza. Desde ella puedo observar verdes prados donde pastan las vacas, enormes montañas rodeándome y que asedian a este pequeño pueblo de Asturias. Los cuervos graznan por este cielo azul, limpio y claro.... claro como la decisión tomada.

Paisajes verdes, ríos cargados de música fluyen a mi alrededor a medida que camino por estas tierras "vírgenes". Una vez más los pensamientos se agolpan en mi cabeza, procuro distraerme intentando clasificar por nombre común y científico la flora que encuentro. Las aves revoletean por esta zona, intento inmortalizarlas con mi cámara pero no lo consigo.

Lo que parecía una semana de trabajo se ha convertido en una encerrona para sentir en primera persona el famoso mobbing... Fiel a mi condición de tranquilo, calmado y sosegado paseo por delante de mis compañeros como un fantasma. Me río por dentro porque soy una persona que no me incomoda el silencio y menos aún pasear solo... Y por suerte no tengo problema por ponerme hablar con desconocidos. Es curioso lo miedoso que es el ser humano (yo el primero). El miedo te lleva a ver fantasmas donde solo hay transparencia, te hace luchar contra molinos de vientos. Te hace pensar mal de la gente, a desconfiar, y sobre todo a defenderte de falsos ataques.. El miedo a perder un puesto de trabajo, a ser relevado de un puesto, o degradado.... Lástima que no se dan cuenta que detrás mía existe la necesidad imperiosa de trabajar y eso es el escudo más fuerte que tengo. Lástima que me vean como un rival más que como un compañero o amigo, pero ellos mismos. El mundo está lleno de gente insegura, miedosa y la única manera de cubrir ese miedo o complejo es atacar a otros.... Ay criaturitas..

Siento no poder escribir más pero una vez más, la inspiración voló junto con mis ilusiones, pero mis sueños siguen intactos así que pronto volveré a las andadas... como siempre de mano de mis fieles escuderos.

Sed buenos

1 comentario:

Anónimo dijo...

Quien pueda pensar eso de tí es porque no te conoce. Lo que cuentas me hace revivir viejos momentos en la ofi, cuando tenía que llamarle la atención a aquel tipo y encima venía su salvador a lapidarme por luchar por mi trabajo.
No te dejes pisotear por nadie y siempre con la verdad por delante verás como al final todo se soluciona. Se fuerte y sigue luchando con fuerza por lo que tu corazón late.
Un beso y solo decirte que no te vengas abajo, que luches contra viento y marea por lo que tú consideras justo y sobre todo si tu conciencia está limpia es porque todo lo has hecho bien. Esther